El mediocampista argentino, proveniente del Cruz Azul mexicano, regresó a Banfield después de 4 años con la idea de devolver al club del Sur a la máxima categoría del fútbol argentino.
La última estadía de Nicolás Bertolo en Banfield fue entre 2008 y 2009, dejándole al "Taladro" un grato recuerdo sobre el paso del explosivo volante. Su regularidad y su galopante crecimiento tanto físico como futbolístico, lo llevaron a ser contratado por el Palermo de Italia. Por su parte, aquél equipo que contaba con Julio Falcioni como entrenador, ganaría el Apertura del 2009. Sin embargo, el presente del equipo que dirige Matías Almeyda desde el torneo pasado lo ubica en el Nacional B tras haber descendido en 2012.
Justamente por eso, llegó una incorporación de enorme jerarquía en la categoría como Bertolo, para soñar con el rápido retorno a Primera. A pesar de ser pretendido por varios clubes de Primera e incluso algunos del exterior, Nico admitió tener muchas ganas de regresar al club del Sur y Cruz Azul lo cedió a préstamo por un año.
El cordobés debutó en la Primera División de Boca en 2005 y dos años más tarde formaría parte del equipo que consiguió la Copa Libertadores de América. Tras su paso europeo por Zaragoza en España y Palermo, donde obtuvo la ciudadanía italiana, Bertolo pasó al fútbol mexicano. Allí se desempeñó en el Cruz Azul donde rápidamente logró el objetivo y se coronó campeón de la Copa MX Clausura en 2013.
A los 27 años, Nicolás Bertolo disputará un torneo muy competitivo y desgastador por los viajes largos. Pero esta temporada en la Primera B Nacional será seguramente con un gusto muy especial, por sumarse al desafío de un nuevo Banfield, que busca lograr el esperado ascenso.
Por Gregorio Gastaldi.
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